Anello dejará de comercializar libros de textos y cerraría después de 105 años de historia porque no puede sobrevivir a la crisis
Así lo confirmó su dueño, Pablo Anello. La emblemática librería atraviesa su peor momento en un panorama desesperante y desalentador desde su fundación el 19 de mayo de 1917.
La histórica librería se encuentra en calle Belgrano al 808 en la ciudad de San Luis y está a punto de cerrar sus puertas. A días del inicio del nuevo ciclo lectivo, tomaron la decisión de dejar de comercializar libros de textos escolares.
La medida es porque hay mucha venta en plataformas digitales y porque las editoriales hacen convenios con vendedores itinerantes que van por los colegios y las comercializan.
“Desistimos porque antes con el compromiso de la palabra, el docente venía, nos encargaba y después los compraba para los chicos a precio costo. Después nos encontramos con que las editoriales les vendía a los que después comercializaban en las escuelas”, reclamó el propietario Pablo Anello, en declaraciones a La Mañana de Dimensión.
Recalcó que fueron acumulando libros porque año a año se renuevan y generan importantes pérdidas.
Con la implementación de las clases virtuales por la pandemia, el libro empezó a quedar de lado. Desde Anello confirmaron que por el momento continuarán con la venta de libros, pero no de textos escolares. Aseguraron que están con liquidaciones y que el movimiento económico es poco.
“Es muy doloroso darle de baja, pero lamentablemente hoy pasa por el lado económico que el libro ya no se consume y el aumento es muy grande. Hay muchas plataformas que compiten con el formato papel y va haciendo que cada vez se lea menos”, reconoció Anello.
Y agregó ofuscado: “Las editoriales te bajan el material y después van por la espalda y te los venden en las escuelas sin pedir tantos requisitos”.
En relación a lo mencionado, existe una ley y está el código de competencia desleal, pero “es Argentina y no se aplican”, criticó.
En cuanto a las ventas un libro de texto escolar se encuentra arriba de los $5000 y han modificado su estructura. Para Anello, “antes un manual era un ladrillito, ahora es un pasquín”.
Uno de los libros más vendidos es “Este dolor no es mío” de Mark Wolynn. Su valor original era de $3650. Al mes pasó a valer $4650. Hace dos semanas estaba a $4900 y ayer a $5500.
La razón de los aumentos para el propietario es porque la mayoría de las editoriales son de capitales extranjeros y están todas basadas en dólares y euros. La devaluación del peso genera una economía insostenible.
“Los interesados en la lectura antes compraban 30 y ahora 10 porque no les alcanza. Hay gente que antes se llevaba en el mes tres o cuatro novelas narrativas románticas y ahora solo una”, detalló.
Subrayó que se encuentra en un panorama desolador. Que la pasaron mal durante la pandemia y que nunca recibieron ayuda de nadie.
“Estamos viendo de pedir un crédito y cambiar de rumbo o alquilar la esquina para que alguien puede explotarla”, concluyó Anello que después de décadas tiene en mente cerrar las puertas de la librería legendaria de San Luis en medio de la escalada inflacionaria.